Para el año 2021, el gobierno tiene proyectado presentar una nueva reforma tributaria, que tiene casi lista. Sería la tercera que presentaría, la primera fue la Ley de Financiamiento, que se cayó por vicios de trámite, en 2018; la segunda fue la Ley de Crecimiento, aprobada en el año 2019, en esta presentó paliativos que confrontaron el gran reclamo social resultado del Paro Nacional, por lo cual se concentró en propuestas populistas, como la devolución del IVA para los más pobres (propuesta que apenas pudo cumplir y que llegó a una mínima parte de los estratos 1 y 2 en Colombia), los tres días sin IVA (que aplicó en medio de la pandemia y que dispararon los contagios y las muertes) y la reducción del porcentaje del aporte a salud por parte de los pensionados. Sin embargo, parece ser que estas medidas generaron un desbalance en los aportes, sumadas a la gran cantidad de exenciones tributarias que aplican para las grandes empresas en Colombia y la crisis social y financiera que provocó la pandemia, en la que gran cantidad de empresas cerraron, quebraron o sencillamente no cumplieron con el pago de aportes e impuestos.

La reforma tributaria será radicada hasta el 16 de marzo, mes en el que se retoman actividades en el Congreso. La discusión será fuerte, porque, de acuerdo a los adelantos que ha hecho el presidente y algunos de sus funcionarios, la nueva reforma buscará gravar los pocos productos de la canasta familiar que estaban libres de IVA o a los que apenas se aplicaba un 5%, para gravarlos por el 19%, se aplicará IVA a los pensionados que reciban más de tres salarios mínimos y se aplicarán más impuestos para los estratos 5 y 6. Estas son apenas algunas de las medidas que se tienen proyectadas y sobre las que se ha iniciado la discusión.

Preocupa la nueva reforma por los graves problemas económicos que enfrentan la mayoría de los colombianos, por la ampliación de la deuda del país y porque gran parte de las empresas y las familias en Colombia no recibieron ayudas durante casi un año de pandemia, además, porque el gobierno invirtió gran parte de su capital en ayudar a los bancos y estos se negaron a bajar las tasas de interés o a facilitar el acceso a los créditos a las pequeñas empresas y a las personas naturales.

La discusión será más álgida porque estamos cerca al año electoral (2022), y es probable que las decisiones que se tomen tengan un alto tinte político. Además, la difícil situación económica que enfrentan gran parte de los colombianos hace prever nuevas movilizaciones y reclamos sociales, que abarcan una agenda amplia, en la que se incluye el incumplimiento de los acuerdos de paz, el pago de peajes, el inicio del fracking y las reformas que se tienen preparadas, entre ellas la tributaria, la laboral y la pensional.

¿Quién presenta la reforma tributaria?

El ministro de Hacienda y Crédito Público, Alberto Carrasquilla, quien fue citado a debate de control político en el 2018 por el Polo Democrático, entre los temas más polémicos que rodean a Carrasquilla están:

-Los famosos “bonos agua” o “bonos Carrasquilla” que empobrecieron a más de 117 municipios, a los que les cobraron tasas de interés exageradas.

-En el gobierno Uribe gestionó la reforma constitucional de 2005 que modificó el régimen pensional y acabó con el régimen especial de pensiones.

-En el 2020 aprobó el préstamo por 370 millones de dólares a Avianca, durante la pandemia.