La Encuesta de Cultura Ambiental 2021 reali­zada por Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, arrojó datos muy interesantes, entre ellos, que más del 80% de la población ha tomado conciencia sobre el ma­nejo de los residuos só­lidos y que además, este mismo porcentaje de la población reconoce que materiales como el papel, el plástico, el vidrio y el metal se deben reciclar y deben ser entregados a los recicladores de ofi­cio; en la misma encuesta se plantea que apenas el 15% de la población reco­noce que el material or­gánico también se puede reciclar, falencia que pro­bablemente viene dada por la poca infraestruc­tura que existe en el país para el manejo de este tipo de material y que se evidencia en el PGIR, en el que apenas se está im­plementado el manejo de este tipo de residuos: “el diseño e implementación de alternativas tecnoló­gicas, distintas al relleno sanitario, para el aprove­chamiento y tratamiento de los residuos sólidos, lo que implica la creación de un programa especial para el tratamiento de re­siduos orgánicos”.

Sobre las cifras po­dríamos sacar muchos más análisis e incluso entrar en una exhaustiva comparación con los bají­simos niveles de concien­cia ambiental que hemos identificado en diferentes espacios de la localidad de Kennedy, con la apli­cación de encuestas, en las cuales menos del 20% de los entrevistados logra identificar al menos dos tipos de materiales apro­vechables, no diferencian conceptos como residuo y basura y menos del 8% logra reconocer que los residuos orgánicos tam­bién se pueden reaprove­char. Pero sabemos que las cifras a veces no son tan significativas como los procesos, por eso des­de hace más de tres años hemos venido implemen­tando diferentes acciones en pro de una consciencia ambiental que ponga en el centro al reciclador de oficio y que reconozca la importancia de visibilizar los procesos de transfor­mación y aprovechamien­to de los residuos sólidos aprovechables y del ma­terial orgánico.

Es por esto que, des­de el mes de septiembre, en la localidad de Kennedy, y particularmente en la Institución Educa­tiva INEM de Kennedy, se ha venido implemen­tando la iniciativa Cír­culo orgánico: Pedagogía para la sostenibilidad, con unas líneas de acción que buscan responder a la pregunta: ¿Cómo creamos una verdadera pedagogía entorno al aprovecha­miento y el reciclaje? Para lograrlo hemos venido trabajando de la mano con los recicladores de oficio en la creación de campañas pedagógicas que tengan incidencia en la sociedad y que generen un cambio de conciencia sobre la disposición, ma­nejo y transformación de los residuos.

Talleres, contenidos y campañas pedagógicas

Lo que hemos iden­tificado, desde nuestra trayectoria, es que en los procesos que se han im­plementado desde otros colectivos y desde las ins­tituciones públicas y pri­vadas, se deja de lado al reciclador de oficio, quien termina involucrado pa­sivamente en el proceso de recolección, pero no interviene en la formula­ción, creación y pedago­gía de las iniciativas am­bientales, por lo cual las campañas de manejo de residuos, de reciclaje y de recuperación del material terminan generando más material para Doña Juana que para el reciclador de oficio ¿Por qué? Porque muchas veces el manejo de residuos sólidos se li­mita a la elaboración de manualidades de corto uso, de limitada capaci­dad, que terminan gene­rando más contamina­ción porque se ensucia el material que el reciclador ya no puede recuperar, es decir, que cuando se utili­za cartón, botellas, tapas y todo el material que se puede recoger y recuperar para crear manualidades de forma masiva, lo que se termina es generan­do más contaminación, porque un material que se podía entregar al reci­clador de oficio para que lo volviera a recuperar se pierde y termina en el re­lleno porque se contami­na, se moja o se llena de pintura, pegantes, etc. Es por esto que hemos crea­do contenidos que ge­neren consciencia sobre el consumo, la correcta disposición y la adecuada transformación de este tipo de residuos, esta úl­tima, tarea que es realiza­da por las organizaciones de recicladores de oficio. (Para conocer sobre estos contenidos visita la pági­na web www.elcallejero.com.co y haz clic en el enlace Círculo Orgánico).

También hemos rea­lizado conversatorios con personas expertas en el tema como Silvio Ruíz, Sandra Carolina Ortiz y con participantes de nuestro equipo como Luis Felipe Camargo, Juan Manuel Arias y Yamile Valencia. Se han llevado obras de teatro a la Insti­tución Educativa y de la mano con la Productora Escolar y Audiovisual La Caja Negra se siguen de­sarrollando una serie de campañas audiovisuales bajo el slogan #Piensaan­tesdebotar.

Una solución escalable para el manejo de los re­siduos orgánicos

Uno de los logros más importantes de la iniciativa es el diseño y producción de una com­postadora didáctica, por­que como lo veíamos en la referencia del PGIR, la ciudad no cuenta con la infraestructura necesaria para realizar el procesa­miento de los residuos or­gánicos, es por esta razón que creamos una com­postadora de material orgánico, cuyo diseño y producción es única y ori­ginal de Círculo orgánico y que permitirá el manejo de los residuos orgánicos de la institución educa­tiva, para generar abono para la huerta, las zonas verdes y en un futuro, para toda la red de huer­tas y humedales de la lo­calidad. Para realizarlo hemos implementado una cuidadosa identificación de los residuos que se generan en la institución para saber cómo debemos procesarlos y qué tipo de abono obtendremos como resultado. Además, vale la pena resaltar que la com­postadora funciona con energía limpia, generada gracias a la interacción de los niños y los jóvenes con la máquina, quienes cada vez que interactúan con ella conocen más sobre su funcionamiento y el pro­ceso de manejo y trans­formación de los residuos orgánicos.

Los medios de comuni­cación comunitarios

Desde el año 2019 el periódico El Callejero se ha convertido en: “Un medio comunitario auto­gestionado que le ha per­mitido a los recicladores y coroteros, tanto a nivel local como a nivel distri­tal, expresar sus voces, escritos y sentires. Allí, informan sobre el estado de su gremio, su día a día, problemáticas, preocu­paciones, objetivos, ex­pectativas y conmemoran cada 1 de marzo el Día In­ternacional del Recicla­dor de Oficio” (Experien­cias de participación para la construcción de paz: IDPAC, 53). Con el pe­riódico hemos realizado pedagogía a la ciudadanía sobre la importancia de reciclar, de separar en la fuente y de mostrar esas historias de vida que nos permiten cambiar para­digmas y estereotipos que se ciernen sobre la figura del reciclador de oficio.

Como ganadores de la beca “La basura no es basura” estamos dando un primer paso, en este proceso que queremos que sea de largo aliento y que esperamos genere una solución a una parte de los problemas ambien­tales de la ciudad, como lo es la recolección, disposi­ción y manejo de los resi­duos orgánicos en Bogotá.