«Emilia Ayarza, Antología»

Si escribir un libro de versos, hacer una obra literaria, si militar en el periodismo, no son obras que hace la mujer ¿Entonces cuáles?  

Emilia Ayarza, El Tiempo, 1947.

Por: Jenny Bernal

 

 

Esta antología realizada por: Juan Afanador, Jen­ny Bernal, Daniel Mon­toya y Santiago Ospina salda una deuda con la tradición poética colom­biana. Una invitación a reflexionar sobre el ca­non y el desconocimiento histórico que las poetas colombianas han enfren­tado en el escenario de la literatura.

Emilia Ayarza es una de las poetas más rele­vantes del siglo XX en Colombia, nació en Bo­gotá en 1919 y falleció en Los Ángeles – EE. UU. en 1966, fue una de las pri­meras mujeres columnis­tas del diario El Tiempo. También se desempeñó como profesora en la UNAM, residió en Méxi­co de 1957 a 1964. Allí pu­blicó en algunos medios como La Tribuna y la revis­ta Mujer. Ayarza presenta una poética que va más allá de la manera conven­cional de abordar ciertos temas predominantes de la época en la que vivió, desde la aproximación al contexto político has­ta una mirada particular por el amor y los afectos. Su trabajo literario pro­pone un nuevo capítulo a la hora de acercarse a la poesía en Colombia.

La antología pre­senta una selección de poemas de cuatro de los libros de la autora: El universo es la patria (1962), Voces al mundo (1957), La sombra y el camino (1950) y Solo el canto (1947); a su vez, cada sección cuen­ta con una nota crítica escrita por reconocidas poetas y académicas que invitan al lector contem­poráneo a acercarse al trabajo de Emilia Ayarza, teniendo en cuenta que muchas veces la ausencia de lecturas atentas y de reseñas sobre los libros hacen que algunas obras literarias pasen desaper­cibidas. Los breves ensa­yos invitan a rescatar a la poeta bogotana del olvido y a realizar aproxima­ciones críticas sobre su obra poética, los textos son: “Universo de carne y hierba” escrito por Caro­lina Dávila; “Compromiso vital” por Fátima Vélez; “El misterio del canto” de Francia Goenaga y “`Emi­lia´ la poesía está hecha para leerse en voz alta” a cargo de Daniel Montoya.

El libro se puede con­seguir directamente con la editorial Magisterio o la Librería Hojas de Parra en la ciudad de Bogotá.

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