«¿Y el INEM?»
Por: Marta Gómez
Seguramente, para una buena parte de la población de la localidad de Kennedy-Techotiba no fue ajeno lo sucedido hace apenas unas semanas en el INEM, el paro y asamblea permanente de algunos estudiantes de sus instalaciones como señal de protesta frente a diferentes situaciones que se vienen presentando en el colegio. Además, hasta cierto punto, fue una situación mediática, grandes medios públicos y privados denunciaron la mala gestión de un rector en encargo en una de las instituciones educativas más importantes del país, el evidente deterioro de sus instalaciones, las pésimas condiciones en las que cerca de 6.000 estudiantes reciben sus clases y el despido arbitrario de 26 docentes, por razones aún nada esclarecedoras.
Desafortunadamente, el paro no se levantó porque todas estas situaciones hayan recibido una solución, todo lo contrario, esa misma noche en la que delegados de la Alcaldía Local, estudiantes y representantes de la Secretaría de Educación llegaron a un acuerdo; había una amenaza circulando por diferentes grupos de WhatsApp, en donde un grupo de personas expresaban de la manera más violenta posible, una retoma del colegio, poniendo en evidencia que estaban dispuestos a agredir a los menores de edad y llegar hasta las últimas consecuencias.
Y, como en las peores crónicas de la violencia de este país, los docentes han tenido que vivir no solo todas las dificultades que conlleva esta situación, sino también amenazas, que a su vez se extienden a las organizaciones sociales del territorio, a madres y padres de familia que también conforman la comunidad educativa. Aunque se quiera normalizar lo que viene pasando en el INEM, lo evidente es que hay intereses oscuros que han sido capaces de enviar anónimos y de movilizar a personas en contra de estudiantes, docentes, colectivos y organizaciones que llevan décadas apostando por una educación digna en el colegio.
Un poco de contexto
Hablamos con Alejandro Cano, representante docente, para conocer más sobre lo que ha venido pasando en la institución.
El INEM de Kennedy es el colegio público más grande de la ciudad, uno de los más grandes del país y con una importante tradición en el sector educativo, de sus aulas han salido ciudadanos que han aportado al crecimiento de la nación. Sin embargo, a pesar de su larga tradición, 53 años, para las administraciones distritales no ha sido más que un simple lote, el cual han dejado deteriorar.
Durante los últimos 12 años, el INEM no ha tenido una inversión significativa en su infraestructura, las últimas adecuaciones fueron de las tres unidades que, a pesar de no tener más de 15 años, ya presentan deterioro. En el INEM se conjuga el fracaso de las políticas públicas en educación de los gobiernos de Peñalosa y Claudia López, que luego de años de recortes en la inversión, dejan como resultado el estado actual del colegio.
Los INEM, creados gracias al Decreto 1962 de 1969 en el gobierno de Lleras Restrepo, pasan a manos de las entidades territoriales certificadas, por efectos de la Ley General de Educación, lo que a largo plazo se tradujo en la reducción efectiva de recursos y su desnaturalización como Instituto Nacional de Educación Media. El INEM de Kennedy no ha sido el único que ha visto su infraestructura deteriorada. En el 2014 el INEM Lorenzo María Lleras de Montería y, este año, el INEM José Manuel Rodríguez Torices de Cartagena han tenido problemas para el sostenimiento de su infraestructura básica.
En el caso particular de nuestra institución, podemos señalar que la problemática se agrava en las últimas administraciones, que suman a las dificultades de infraestructura, el fracaso en el acceso y permanencia y la falta de estudios técnicos que sustenten las políticas públicas. A manera de ejemplo, en la localidad fueron proyectados cinco nuevos colegios, a pesar de que la localidad tuvo una disminución de cerca de 11.000 estudiantes; además, se limitó el alcance de las rutas escolares y no se dispuso de un nuevo presupuesto para el traslado de estudiantes de zonas deficitarias a los colegios de Kennedy Central. Al parecer, es una estrategia de la administración distrital debilitar las instituciones educativas públicas de la ciudad y acabar con el INEM de Kennedy.
El efecto directo de esta situación es la disminución de estudiantes, del INEM se han ido más de 1000 estudiantes en los últimos años, sumado a esto se han entregado sin carga académica más de 33 maestros, se han perdido importantes convenios con el Instituto de Lenguas de la Universidad Distrital (ILUD) para ofertar el aprendizaje de una segunda lengua y el convenio con la Secretaría Distrital de Ambiente para consolidar el corredor ambiental con el humedal La Vaca.
De otro lado, la administración interina no brinda una respuesta efectiva a las problemáticas, sino que, en su lugar, hace todo lo necesario para ignorar dicha situación como si en el colegio nada pasara, dándole un tratamiento cosmético a problemas estructurales. El INEM requiere de un rector en propiedad que asuma el liderazgo que a la fecha no tenemos.
¿Cómo ha sido la nueva normalidad?
Luego de la firma del Acta del 8 de marzo en las instalaciones del INEM, con la cual se levanta la Asamblea Permanente y se llega a un preacuerdo de iniciar diálogo directo con los funcionarios de la Secretaría de Educación Distrital (SED), se han instalado diversas mesas de trabajo donde la mesa liderada por los estudiantes no ha parado de sesionar y seguir aportando propuestas para el mejoramiento de la institución.
Se han llevado a cabo diálogos constructivos frente a la calidad del PAE, temas de infraestructura escolar, modalidades, entre otros. Aún quedan pendientes varios temas importantes y reuniones de seguimiento a los acuerdos.
Estos avances se dan en medio del desconocimiento por parte de una rectoría interina a la labor realizada por la mesa de diálogo con la SED. A la fecha, a pesar de ser reiterada la invitación a participar de dicho espacio, la negativa de las directivas institucionales no solo es evidente, sino que en su lugar están más ocupadas en tratar de “recuperar la imagen del INEM” y resarcir el “daño” causado por la toma de las instalaciones, que de articular una propuesta con la mesa de diálogo. En pocas palabras, es tratar de retornar al pasado como si los problemas no existieran, como si la infraestructura no estuviera deteriorada, como si los maestros nunca se hubieran ido y como si el INEM aún fuera el gran referente pedagógico del pasado, se trata de ocultar el sol con un dedo.
¿Qué acciones se tienen pensadas a mediano y a largo plazo?
En el corto plazo se espera avanzar en la consolidación de los acuerdos en temas de PAE, la estabilización de la matrícula y con ello la planta de maestros, el arreglo prioritario de algunos elementos de infraestructura, el fin del interinato y el nombramiento de un rector en propiedad, que brinde garantías a la comunidad, el cumplimiento de los acuerdos planteados con la SED y a la reconstrucción del tejido social que, durante los últimos años se ha visto fuertemente lastimado.
En el mediano plazo, se espera la restitución del restaurante escolar para poder ofertar a nuestros estudiantes comida caliente y condiciones dignas en la institución. También, recuperar los convenios con el ILUD y avanzar en la construcción de un proyecto educativo que vincule las necesidades de la comunidad de la localidad, pero también a los diferentes colectivos, sociales, culturales, deportivos y de otra índole que articulen al INEM con la memoria histórica del territorio.
A largo plazo, buscamos que a través del Plan Distrital de Desarrollo contemos con una nueva infraestructura y en articulación con las universidades públicas (especialmente la Universidad Distrital), proyectar al INEM como un nodo educativo donde converja la comunidad de la localidad, el estudiantado, el arte, la cultura, la historia y la memoria.
Adicional, proponerle al Congreso de la República y al Ministerio de Educación Nacional (MEN), la modificación del parámetro del Decreto 3020 de 2002 y el retorno de los INEM bajo la tutela directa del MEN con una reforma al Artículo 208 de la Ley General de Educación.
¿Y los profes?
Los profes no dejan de soñar en que estos acuerdos se cumplan, pero no se debe dejar en el aire que la administración actual del colegio ha calumniado y perseguido a los docentes y a los procesos sociales que han buscado, de una u otra manera, calidad educativa, garantizar el alimento, fortalecer procesos ambientales, de comunicación y cultura en la institución. La desvinculación de los docentes es como cortar las arterias y las venas comunicantes entre la institución y el territorio, en una administración que ni siquiera reconoce la importancia de las reivindicaciones históricas de las organizaciones y colectivos, como ha sido el nombre de Techotiba para toda la localidad.
Retomamos las palabras del profe Gianni Lara, quien hasta hace unas semanas fue elegido como representante del Consejo Directivo y quien hace parte de los 26 docentes que fueron reubicados: “Con mi salida de la institución no solo truncan el proceso pedagógico que he llevado a cabo durante trece años. Acaban con la posibilidad de seguir haciendo comunicación popular en el colegio a través de Sumando Voces, de la prensa alternativa que ha llegado al colegio durante 13 años y ha abierto espacios para fortalecer otros medios de comunicación en la institución. Sacan al maestro de la emisora que él mismo gestionó, ayudó a construir, reparó, pintó y puso a funcionar para que sus estudiantes desarrollaran sus habilidades comunicativas con pensamiento crítico.
Dañan el proceso colectivo con organizaciones del territorio y padres de familia a través del Comité de Soberanía Alimentaria del INEM, que pretendía crear una asociación de padres de familia para gestionar el restaurante, con el fin de darles comida caliente a los estudiantes a través de recursos estatales y la posibilidad de que las organizaciones sociales del territorio de Kennedy y las universidades cercanas pudieran sumar colectividades en la construcción de procesos pedagógicos y curriculares que devuelvan el prestigio a nuestro INEM.
Destruyen la propuesta pedagógica que hemos presentado y construido con maestros en la institución en donde planteamos el Proyecto Educativo Comunitario (PEC) a través del Currículo Alterno, para promover el pensamiento crítico mediante el análisis de las realidades, desde el modelo IAP y una jornada única que pudiera integrar procesos planteados por nuestra propia institución y las comunidades, con unos efectos reales sobre la transformación de nuestro territorio.
Aniquilan la democracia sacando (solo con la discrecionalidad del rector), el voto de 92 maestros inemitas que vieron en mí la posibilidad de hacer frente a las injusticias de la institución”.
Detrás de los profes se van los procesos, las luchas y el tejido social, todas situaciones a las que el rector le sigue dando la espalda y sigue vulnerando, reconociendo que sin estos docentes tendrá el camino más fácil para hacer contrataciones non sanctas, y dejando el camino llano para proyectos que desde hace años vienen caminando y siendo frenadas por los profes, los estudiantes y las organizaciones, como el uso en proyectos externos de varias zonas deportivas y zonas verdes de la institución, desarticulando y desprotegiendo el patrimonio natural y cultural de la localidad.
Invitamos a esas miles de familias que, como egresadas, estudiantes y docentes hacen parte de la comunidad educativa del INEM de Kennedy, a seguir de cerca la situación que se viene presentando y a revisar a fondo las enormes repercusiones que pequeñas acciones pueden tener en lo local. Así mismo, a rodear a docentes y estudiantes que han asumido el proceso y que hoy siguen siendo vulnerados por los administrativos del colegio, además de calumniados y envueltos en largos procesos judiciales, tan solo por denunciar lo que viene siendo evidente desde hace varios años, y es que en el INEM cada día hay menos garantías de calidad educativa con instalaciones deficientes, sin docentes, sin tejido social y sin alimento digno.