«Vamos a re-usar»
El coroto es pasión y una cultura que no debe morir.
Por: Carlos Bohórquez
Desde hace mucho tiempo, los recicladores han recuperado de la “basura” artículos que son desechados en muchos lugares de la ciudad. Han tomado la “basura” y la han reparado, maquillado, limpiado, recuperado y transformado en un objeto diferente.
Ese objeto se convierte en el bendito, adorado y sagrado coroto – cachivache. Con los corotos hacemos vida, con un buen cachivache hay un almuerzo o sencillamente un “buen diario”. Que beneficia no solo al reciclador, sino también, a miles de personas que buscan el mercado del piso, pulgas o Cartuchín para satisfacer su necesidad de encontrar artículos que, sería imposible adquirir nuevos en un almacén o un centro comercial.
Los corotos y los cachivaches son el complemento a la digna, sacrificada e importante labor del reciclador, quien como actor primario ve sus ingresos mejorados. Además, genera un impacto social, económico y ambiental, aportando un importante beneficio a la ciudad.
Hago un llamado a todos los compañeros pertenecientes a este gremio, a que en el año que se avecina, se unan y se organicen alrededor del diálogo, a que apoyen a los líderes y a estos espacios de comunicación e información como El Callejero.
Si se logra que el Cartuchito, como espacio de trabajo, se mantenga organizado, se podrá comerciar y se tendrá un espacio bien visto por la comunidad. Así, los clientes y ciudadanos permanecerán visitándonos, ávidos de comprar.
No cerremos más puertas ni construyamos más muros entre nosotros mismos.