«Kennedy en el ojo del huracán»
Por: Carlos Ruíz
El incremento de la fuerza pública en la localidad no es sinónimo de percepción de seguridad para sus habitantes. Mucho menos, cuando desde hace meses las organizaciones de derechos humanos de la localidad y diferentes organizaciones sociales vienen denunciando los abusos policiales a los que se ve sometida la población y el aumento de denuncias ciudadanas, casi que directamente proporcional al aumento del pie de fuerza.
Y aunque la Alcaldía ha hecho énfasis en afirmar que no se trata de una intervención militar en la capital, otra cosa piensan los habitantes que todos los días deben toparse con estos operativos militares en las calles. La simbólica presencia del Ministro de Defensa y otros representantes del gobierno nacional y distrital en la localidad, no deja de generar dudas sobre el verdadero objetivo de este despliegue de fuerza pública, que siempre parece insuficiente. En lugar de policía y de militares deberían promoverse ejercicios y espacios de paz y reconciliación en una localidad que lleva, prácticamente un año, con un saldo incontable de ciudadanos heridos y con un número de muertes y de situaciones intolerables, como la escabrosa escena del cuerpo sin vida de Duvan Barros en el caño detrás del Portal Américas, en medio de las movilizaciones sociales. La localidad de Kennedy necesita espacios de encuentro y de diálogo para generar soluciones internas y autónomas a sus problemáticas sociales. La solución no ha sido, ni es, ni será aumentar el pie de fuerza militar y policial.