Si hubo algo que caracterizó al gobierno de la actual alcaldesa, a quien le quedan escasos dos meses para terminar su mandato, fue la mentira. Pero, más que la mentira que ya parece ser una característica implícita en mandatarios y gobernantes, lo que más logra desconcertar de la primera mujer que asumió el segundo cargo más importante de la nación, ha sido el cinismo con el que lo ha hecho. A Claudia no le ha pesado la cara y mucho menos le ha temblado la voz cuando ha salido a los medios a hablar, por ejemplo, del avance de las obras, como si los ciudadanos atravesaran Bogotá con los ojos cerrados y no vieran la ciudad en ruinas, con obras abandonadas, huecos y polisombras por extensos trayectos de inseguridad y desolación. Mintió en la pandemia en la que dejó encerradas y sin apoyo económico a miles de familias y ha mentido estruendosamente al seguir presentándose como una abanderada ambientalista cuyos principios dialogan con el eslogan verde de su partido, cuando la realidad ha sido otra; una, al parecer inexplicable, obsesión por talar árboles y por priorizar el cemento y sus fallidas obras por sobre el poco verde que le quedaba a Bogotá.

En esa misma línea, se inscribe la decisión que se dio a conocer el pasado 25 de octubre, cuando en un recinto cerrado, con casi ninguna participación ciudadana y rodeada de funcionarios y candidatos de su partido, presentó la modificación del Plan Parcial Bavaria Bogotá, con muy pocas modificaciones y enormes falacias como la de la concertación ciudadana y la protección del bosque. A lo que la alcaldesa trató de restarle importancia fue al anunció de la construcción de 14.000 viviendas, lo que implica la llegada de mínimo 42.000 personas, lo que requiere no solo viviendas, sino toda la construcción de alcantarillado, servicios de energía, andenes, calles, espacio público, una enorme infraestructura que deja a un lado el bosque y afecta su ecosistema y sus conexiones subterráneas.

El periódico El Callejero tuvo la oportunidad de hablar con Laura Cala una de las lideresas del colectivo Somos Bosque, quienes han encabezado la defensa de este importante ecosistema y trabajado en la protección legal del bosque, sobre lo expuesto ese día por alcaldesa mencionó que: “En estos momentos, es la ratificación de lo que hemos denunciado durante muchos años y es que los intereses privados siempre pesaron más y utilizaron la argucia de la participación ciudadana, porque es el discurso que posicionaron, al decir que este proyecto era uno de los ejemplos de concertación con la ciudadanía para poder llegar a acuerdos importantes. Frente a las medidas cautelares, esas no se han levantado, de hecho, hace más o menos un mes hubo una audiencia pública en donde tenían que seguir presentando pruebas y las medidas siguen presentes, quizás eso también puede ser una garantía y lo que nosotros decimos es que vamos a hacerle hasta el último suspiro, porque es necesario, porque no es una conversación solamente de localidad, sino también de ciudad”, expresó.

Reconocemos la lucha ciudadana de esta colectividad y por eso compartimos el comunicado que se publicó al día siguiente de las declaraciones de la alcaldesa, en el que expusieron la vulneración que sufrirá el bosque y sus ecosistemas, así como las mentiras que fueron expuestas en dicho evento y la vulneración simbólica a la que vienen siendo sometidos como colectivo, en la actual administración:

Desde el colectivo “Somos Bosque”, defensores del Bosque Bavaria Madre de Agua, nos dirigimos a la opinión pública, a las autoridades competentes y a toda la ciudadanía con el fin de manifestar nuestra profunda preocupación y desacuerdo con el proceso de aprobación del Decreto 448, emitido el 5 de octubre de 2023, conocido como el “Plan Parcial Bavaria Fábrica”. A pesar de las afirmaciones de los desarrolladores e instituciones como la Secretaría de Ambiente, Hábitat, Planeación, IDPAC y la Alcaldía Mayor de Bogotá, que aseguran que se trató de una modificación concertada con la comunidad, aclaramos que, en estas circunstancias, las 70 colectividades que hemos estado vinculadas a la defensa del bosque NO hicimos parte de estos diálogos de concertación debido a la falta de garantías adecuadas para una participación efectiva y de incidencia significativa.

El 25 de octubre de 2023, nos enteramos de una invitación selectiva a una socialización con diversas entidades distritales, incluyendo a la alcaldesa Claudia López y a los desarrolladores del Proyecto, en cabeza de su gerente y representantes de las constructoras Prodesa, Marval, Cusezar y Bolívar. Lamentablemente, esta invitación excluyó a la comunidad que ha expresado su desacuerdo con el Plan Parcial Bavaria Fábrica y se realiza a puerta cerrada. Este acto pone de manifiesto una falta de voluntad para escuchar y considerar las preocupaciones legítimas de quienes defendemos el Bosque.

Los desarrolladores del Plan Parcial ahora utilizan el eslogan “Un Bosque para toda la vida”, esto sin duda, representa una apropiación de la consigna #BosqueBavariaParaLaVida del colectivo Somos Bosque. Denunciamos la usurpación de la identidad construida durante años en esta lucha colectiva, desdibujándola y ejerciendo VIOLENCIA SIMBÓLICA.

Desmentimos los argumentos que aseguran modificaciones en la estructuración del megaproyecto, que desde 2017 y hasta la fecha, no ha tenido cambios a favor de la conservación del ecosistema puesto que, continúa permitiendo la tala de gran parte del arbolado original para la construcción de equipamientos y no presenta reducción en cuanto al número de apartamentos que, al contrario, han aumentado. Esto representa graves implicaciones para una localidad que ya ha superado su límite de densificación urbana empeorando así la calidad del aire de Kennedy, considerada la más contaminada de Colombia según el IDEAM.

Por todo lo anterior, ratificamos que el “nuevo” Plan Parcial sigue siendo una mentira y una manipulación a la comunidad, legitimado por la Alcaldía Distrital de Bogotá en beneficio de un interés privado, por ende, este nos traería un Bosque de cemento para destruir la vida que afectaría los derechos fundamentales a la vida, a la salud y el derecho colectivo a un ambiente sano.

A pesar de nuestra indignación seguiremos reivindicando un #BosqueBavariaParaLaVida en beneficio de las generaciones presentes y futuras. SOMOS BOSQUE, y no permitiremos su destrucción”.