Para Jorge Eliécer Ospina el reciclaje no es un trabajo cualquiera y ser reciclador no es simplemente una profesión. “Ser re­ciclador es todo, yo llevo 27 años, es mi vida, yo digo que yo ya muero siendo re­ciclador y por mis venas corre sangre recicladora, es algo inexplicable, lo amo y lo adoro”, afirma. Desde ese amor que siente por su oficio, Jorge Eliecer recono­ce lo que han alcan­zado como gremio y lo que falta, así como el poco interés que han demostrado las administraciones ac­tuales por fortalecer y respaldar a las dife­rentes asociaciones de recicladores.

¿Cuáles han sido esos derechos al­canzados por los recicladores de ofi­cio?

Desde el año 93, en el gobierno de Jai­me Castro, comenzó la privatización del Servicio Público de Aseo y ahí empezó a haber un descono­cimiento de los reci­cladores. En el año 2002, se hizo la pri­mera tutela, el fallo salió en el 2003 que es la T-724, donde reconocen a los reci­cladores y exhortan a la Alcaldía Mayor de Bogotá para que en futuras licitacio­nes tenga en cuenta las acciones afirma­tivas de los recicla­dores. Se viene 2003 y después ya de ahí para arriba, hasta el 2012, es que se logran hacer las ac­ciones afirmativas y es porque en el año 2011 también logra­mos tumbar una lici­tación. Ya en el 2012, en la administración de Gustavo Petro, es donde se logra que a los recicladores se les empiece a pagar por su trabajo. ¿Qué hemos ganado? Pri­mero, reconocimien­to, que nos paguen por nuestro traba­jo y por el servicio prestado. Segundo, que la Corte prote­ge los derechos de nosotros los recicla­dores. Desafortuna­damente, aunque te­nemos muchos fallos a favor, todavía se siguen vulnerando nuestros derechos.

¿Qué falta para el gremio reciclador?

Bueno, primero que todo, hoy en día, aunque tenemos un fallo para el pago de una tarifa, la Super­servicios y el Gobier­no nacional siguen atacando mucho a los gremios de los re­cicladores, ¿Por qué? porque hoy en día ya nos están cerran­do la brecha para poder reportar más materiales, porque en el sistema, ellos ya dicen que no po­demos reportar tan­to plástico, que no podemos reportar tanto papel, es decir, nos van cerrando la brecha. Segundo, hay un ataque sistemáti­co hacia los gremios de recicladores, al eslabón más débil que es el reciclador.

 ¿Existe diálogo con el actual gobierno y con la Alcaldía Ma­yor de Bogotá?

Pues, digamos con esta alcaldía particularmente ha habido diálogo con la mesa del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (PGIR), se hizo un proceso, donde hubo un diálogo y están los delegados del PGIR. Pero más allá de realmente una in­clusión, todavía no se ha visto, porque se dicen unas cosas en el PGIR, pero ellos intentan meter otras cosas por otro lado.