«Predomina el patriarcado para las elecciones del 2022»
Por: Melisa Sánchez
En días pasados, la encuesta Invamer entregó el resultado de la intención de voto si las elecciones se fueran a realizar este mes, con una larga lista de posibles candidatos como Gustavo Petro, Sergio Fajardo, Rodolfo Hernández, Juan Manuel Galán, Federico Gutiérrez, entre otros; lo que llamó realmente la atención fue que la voz de las mujeres brilló por su ausencia.
Es bastante cuestionable que a menos de ocho meses de las elecciones no se cuente con la presencia de mujeres en estas listas. Indicador de que el poder en Colombia seguirá en manos del patriarcado.
Si bien es cierto, en el escenario político rondan nombres como María Fernanda Cabal, Martha Lucía Ramírez, entre otras, estas son cuotas del uribismo que se encuentran permeadas de constante polémica. En la misma línea política se observa cómo el gobierno actual en un aparente esfuerzo por cumplir la Ley 581 del 2000: “por medio de la cual se reglamenta la participación de la mujer en los niveles decisorios de las diferentes ramas y órganos del poder público”, entrega cargos y ministerios a mujeres que no están al nivel de esos compromisos; como en el reciente caso de la ministra de las TIC Karen Abudinen, sobre quien ya se habían prendido las alarmas, dada su inexperiencia en temas relacionados con la tecnología y la información y cuyo polémico caso terminó con la desaparición de $70 mil millones. Lo mismo pasa en el Congreso con las familiares de parapolíticos y narcotraficantes, sus hijas, esposas o parientes que pasan a ocupar curules y que solo sirven para mantener el poder político de esos hombres condenados por la justicia, ellas no representan el talento humano de la mayor parte de mujeres en el país.
En la otra orilla de la política, es importante resaltar los cargos de representación política ejercidos a consciencia y con responsabilidad por mujeres como María José Pizarro, Aida Avella, Katherine Miranda, entre muchas más, que lideran proyectos e iniciativas en sus partidos. El Pacto Histórico, decidió irse por lista cerrada al congreso para garantizar la representación de las mujeres, las comunidades LGBTI, las negritudes, las comunidades indígenas, campesinas y todos los que participan de ese pacto social. Sin embargo, ni siquiera el Pacto Histórico pudo estar exento de la polémica, ya que hace algunos meses Ángela Robledo, quien fuera en las elecciones del 2018 candidata a la vicepresidencia en la candidatura de Gustavo Petro, decidió desvincularse del partido por sentir que no tenía la voz suficiente dentro del mismo, desafortunadamente su paso a la Coalición de la Esperanza la ha dejado dando su apoyo candidatos tradicionales, que no se han preocupado por balancear la participación de diversos sectores de la sociedad en su partido.
Por ahora, el Pacto Histórico es el único de los movimientos políticos que realizará una consulta interna de candidatos presidenciales en la que hay además de mujeres, representación de las negritudes y las comunidades indígenas. A la fecha hay cinco precandidatos: Gustavo Petro de la Colombia Humana, Alexander López por el Polo Democrático, Roy Barreras por La Fuerza de la Paz, Francia Márquez por el movimiento Soy porque Somos y la lideresa indígena Arelis María Uriana Guariyú, en representación del partido MAIS.
Así y todo, todavía es muy grande la brecha entre hombres y mujeres, el domino masculino es absoluto en los cargos más altos de poder. Es tiempo de romper paradigmas, acabar con la vieja tradición machista y empezar a entregar el poder a las líderes, el país está lleno de ellas solo que necesitan fuerza y mucho más apoyo y respaldo ciudadano.
Para tener en cuenta
1. El problema de la «representatividad femenina » no radica en la cantidad de mujeres sino en el feminismo con el tipo de feminismo con el que se identifican. Si el problema fuera elegir una mujer… pues nuevamente elegirías a Claudia? Entonces el problema no solo radica en el género.
2. Precisamente Angela Angela Robledo representa eso, un tipo de representación feminista que no cuestiona el modelo de proyectos como Hidroituango.
3. Con el fin de no desinformar, vale la pena que este tipo de textos tenga en cuenta el manifiesto de muchas mujeres de COLOMBIA HUMANA y Unión PATRIÓTICA que a través de un comunicado (luego de la pataleta de Robledo) manifestaron que las mujeres sí tienen un espacio dentro de esa coalición. Entre las firmantes están Aida Abella o la concejala Heidy Sanchez.
4. A lo bien María Ángela Robledo puede representar una opción feminista contra el modelo económico colombiano?